Recuerda
no solo lo que digas
puede ser
usado en tu contra
también puede usarse
lo que calles
o lo que querías decir
pero nunca dijiste.
Recuerda
que el molino no cesa
en su ejercicio
de dar vueltas
y que mucho antes
del trigo
la piedra ya estaba ahí
esperando su grano.
Nunca olvides
que no solo por la boca
muere el pez.
Muchos son los casos
en que se le ha visto
morir por el ojo
o la aleta.
En el ala del pájaro
nace el pájaro
y lo mismo dígase
de su canto.
Todos los horizontes
son caminos
torcidos por la soberbia
del sol
y no todos los senderos
conducen a Roma.
Recuerda
no solo lo que digas
puede ser
usado en tu contra.
El Silencio Dixit
Sobre esta página
En la presente selección de textos se encuentran bosquejados años de vida, en los cuales lo único que jamás me ha abandonado ha sido la inquietud poética. Las temáticas son variadas, pasando desde problemas hondamente cotidianos, para luego adentrarse en ciertas intuiciones filosóficas que han sido garabateadas en algunos versos. Su participación como lectores es de altísima importancia, puesto que ustedes son, al final de cuentas, quienes me ayudarán a configurar los libros que, a partir de este espacio en la red , proyecto para el futuro.
Bienvenidos
Mauricio Mena Iturriaga
Bienvenidos
Mauricio Mena Iturriaga
jueves, 9 de abril de 2015
viernes, 3 de abril de 2015
Vino
La uva en la parra
es una niña consentida
que sólo en la botella
descubre el sentido de su vida.
es una niña consentida
que sólo en la botella
descubre el sentido de su vida.
Rocío
Como un collar de perlas
sobre la pradera
luce el diamantino rocío
que del cielo se descuelga.
sobre la pradera
luce el diamantino rocío
que del cielo se descuelga.
Fábula de una noche
Las estrellas despiertan
cuando se duerme el sol
y en el espejo de la luna
se contempla el creador.
cuando se duerme el sol
y en el espejo de la luna
se contempla el creador.
Lluvia bajo la higuera
La lluvia desciende
por las hojas de la higuera
y en sus raíces duerme
la exuberante primavera.
por las hojas de la higuera
y en sus raíces duerme
la exuberante primavera.
Piedra a la intemperie
Yo no sé a quién espera
la piedra inconmovible
si a la lluvia que la acaricia
o al viento que la desviste.
la piedra inconmovible
si a la lluvia que la acaricia
o al viento que la desviste.
Bolsa del desierto
Nadie sabe de dónde viene
nadie sabe hacia dónde va
cruzando la tierra baldía
el horizonte alcanzará.
nadie sabe hacia dónde va
cruzando la tierra baldía
el horizonte alcanzará.
Arando
El surco es el arado
tanto como el arado el surco.
Dígase lo mismo del hombre
pero en otro sentido.
tanto como el arado el surco.
Dígase lo mismo del hombre
pero en otro sentido.
Asunto de gravedad
El fruto maduro no cede al peso
sino que se entrega a él
sino que se entrega a él
Cuánto podría aprender de esto
el hombre y su ligereza.
el hombre y su ligereza.
Desapego
Ser un poco más la piedra lanzada
y un poco menos quien lanza la piedra
Ser un poco más mejilla mancillada
y un poco menos palma justiciera
Ser un poco más grano machacado
y un poco menos molino que da vuelta.
y un poco menos quien lanza la piedra
Ser un poco más mejilla mancillada
y un poco menos palma justiciera
Ser un poco más grano machacado
y un poco menos molino que da vuelta.
lunes, 16 de marzo de 2015
Trascendencia
Me tiene sin cuidado
el tiempo y la muerte
Yo soy infinito
en los ojos de quien
Me lee.
el tiempo y la muerte
Yo soy infinito
en los ojos de quien
Me lee.
Analogías
Al pan duro
leche tibia
miel y canela
Al trigo sucio
azotes
molino y piedra.
Al suelo muerto
arda fuego
ceniza y espera.
leche tibia
miel y canela
Al trigo sucio
azotes
molino y piedra.
Al suelo muerto
arda fuego
ceniza y espera.
viernes, 13 de marzo de 2015
En algún lugar del mundo
Entonces
la noche
Serpiente
mordiendo
su propia cola
Uróboros cósmico
engullendo
la distancia
Dios ha
vuelta dado
el salero
del firmamento
sobre el negro
repetido repetido
del cielo
de la noche
la noche
Serpiente
mordiendo
su propia cola
Uróboros cósmico
engullendo
la distancia
Dios ha
vuelta dado
el salero
del firmamento
sobre el negro
repetido repetido
del cielo
de la noche
Aquí
el agua
pareciera
estar siempre
esperando
la señal
de la lluvia.
el agua
pareciera
estar siempre
esperando
la señal
de la lluvia.
Bajan
los vientos
al bosque
para beber
del manantial
entre
el follaje
escondido
los vientos
al bosque
para beber
del manantial
entre
el follaje
escondido
El mar
es
tan sólo
el rumor
de los ancestros
que siembran
en la orilla
la flor
de la memoria.
el rumor
de los ancestros
que siembran
en la orilla
la flor
de la memoria.
Esta es
la última morada
del Sol
La cordillera
refresca
sus pies de cobre
en la blanca
espuma del océano.
Los peces
en grandes bancos
cubren las mareas
como cota de malla
sobre el cuerpo
frágil de las aguas.
Aquí
el viento va modelando
las nubes
que irán a escoltar
al ocaso
y las gaviotas.
la última morada
del Sol
La cordillera
refresca
sus pies de cobre
en la blanca
espuma del océano.
Los peces
en grandes bancos
cubren las mareas
como cota de malla
sobre el cuerpo
frágil de las aguas.
Aquí
el viento va modelando
las nubes
que irán a escoltar
al ocaso
y las gaviotas.
son grandes centinelas
esperando
la llegada del estruendo
En los faldeos
de sus encanecidas testas
la tierra desnuda
exhibe sus negras cicatrices.
Chorreando
justa analogía la piedra viva es
del hombre
rebalsando sus costumbres
sembrando
la triste semilla de su emergencia.
lunes, 22 de diciembre de 2014
Gonzalo Rojas
Y entonces advino el relámpago
premonición del verano
hijo prematuro del solsticio de la carne
y de los meses donde las mujeres
muestran los racimos alegres de su hermosura.
Recién caído del sexo de tu madre
lloraste con un sobrecogedor silencio, y entonces
repartido en múltiples esquirlas de canto
fue tu vida un rayo duplicado
punto suspensivo en la prosa de la sangre.
En todas las cosas te encuentro, Gonzalo Rojas
pues todas las cosas hablan en ti
como la eternidad habla
en los brazos de la maldita, esa única y pérfida
explosión de hermosura que todo lo ocupa.
Hoy los espejos narran tu leyenda
el mundo se adentra en la selva de tus ojos taurinos
los ríos del sur detienen su azul caravana
y de hinojos se postran los horizontes
para ver desplegarse el milagro de tu voz.
premonición del verano
hijo prematuro del solsticio de la carne
y de los meses donde las mujeres
muestran los racimos alegres de su hermosura.
Recién caído del sexo de tu madre
lloraste con un sobrecogedor silencio, y entonces
repartido en múltiples esquirlas de canto
fue tu vida un rayo duplicado
punto suspensivo en la prosa de la sangre.
En todas las cosas te encuentro, Gonzalo Rojas
pues todas las cosas hablan en ti
como la eternidad habla
en los brazos de la maldita, esa única y pérfida
explosión de hermosura que todo lo ocupa.
Hoy los espejos narran tu leyenda
el mundo se adentra en la selva de tus ojos taurinos
los ríos del sur detienen su azul caravana
y de hinojos se postran los horizontes
para ver desplegarse el milagro de tu voz.
jueves, 18 de diciembre de 2014
De atrás pa’delante
¿Qué fue de nuestros pasos
qué fue del aire vertido?
¿A dónde fueron a parar
los horizontes pretéritos?
¿Quién se ha llevado
los restos del naufragio?
¿Dónde se esconden
las respuestas anheladas?
¿Cómo podemos ahora
restaurar la vida deshecha?
Cristal fragmentado
horrendo puzle incompleto
Hay que invertir al hombre
partir por su reverso
Pelarlo como fruta madura
del cuesco a la piel
Y desde allí desmantelar
su coraza de certezas
Hay que quitarle sus ropas
dejarlo todo calato
Exhibir sus tendones
enarbolar
sus menudencias
exponer
sus tristes articulaciones
Mostrar sus precarias carnes
asesinar los eufemismos
Hay que reinventar al hombre
de adentro hacia afuera
de afuera hacia adentro
Hay que desalojar al hombre
y dejar que otra bestia
ocupe el lugar que ha abandonado.
viernes, 5 de diciembre de 2014
Casi amor
Quiero sin querer quererte
y en el intento de no amarte
entregarme sin cuidado.
Quiero quererte sin quererlo
y que te quedes a mi lado
Quiero sin querer quererte
con el cariño que profesa
la eternidad por el instante.
Quiero quererte sin quererlo
y a tu lado hacerme grande.
Quiero sin querer quererte
más allá de todo egoísmo
sin pretensión alguna.
Quiero quererte sin quererlo
como las mareas a la luna.
Quiero sin querer quererte
humilde como una caricia
de sol sobre el rocío.
Quiero quererte sin quererlo
hasta que se acabe el frío.
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